En esta experiencia, Jordi Serarols Boada y Xavier López Ortín nos presentan un proyecto llevado a cabo en la Escuela Octavio Paz (Barcelona), un centro que ha recibido varios premios de educación por haber podido transformar una escuela desfavorecida en una escuela exitosa.
El altar de muertos, en el marco del Proyecto de Intercambio Catalunya-México de la escuela, es una celebración para sumergirse en la cultura mexicana.
Es una pieza clave para entenderla e implicar a toda la familia y comunidad educativa para recordar, hacer memoria y homenajear a los antepasados. Es una oportunidad donde se hace de la muerte una fiesta de los sentidos, pero también de los sentimientos y de la razón, porque de las personas nos quedan las imágenes, los objetos, los recuerdos… y también las palabras.
En el caso concreto de esta propuesta, este altar se dedica a una persona fallecida a lo largo de ese año, con una trayectoria personal y profesional relevante en nuestro país que puede ser inspiradora para nuestros niños y niñas
A continuación os compartimos una galería con algunas imágenes de las diferentes etapas del proyecto, con la participación del alumnado, las familias y del profesorado:
Podéis encontrar la experiencia completa en la Revista Aula (Competencia Global y ODS) nº310 (clic aquí).
