La socialización supone el acceso progresivo de la niña y el niño a la participación original, placentera y creativa en su entorno social. Si bien nacemos con la disposición a relacionarnos con los demás, son necesarias condiciones favorables para su desarrollo e incluso, a veces, apoyos para desarrollar la empatía y para comprender y adquirir los complejos códigos de relación entre humanos.
La socialización permite la integración activa de la niña y del niño en su entorno social cercano. Aunque suene paradójico, para construirnos como…