Hoy se asume, sin ningún género de dudas, que lo verdaderamente importante en la enseñanza de la geografía urbana no es tratar de describir y explicar todo lo que se observa en las ciudades, sino comprender cómo se organizan esos espacios en tanto que están ocupados por las sociedades humanas o, dicho de otra manera, cómo funcionan las sociedades en los espacios urbanos. Se trata, pues, de “razonar geográficamente, pensar el espacio” y, a la vez, estudiar la organización del espacio como producto social, lo que permitiría a las alumnas y a los alumnos comprender los procesos de pr…