Escribir es un camino arduo y lleno de obstáculos, pero vale la pena el esfuerzo porque, al final, está la recompensa de ver cómo estallan las ideas sobre el papel y resultan sorprendentes, bellas o extrañas.
Escribir es un camino arduo y lleno de obstáculos, pero vale la pena el esfuerzo porque, al final, está la recompensa de ver cómo estallan las ideas sobre el papel y resultan sorprendentes, bellas o extrañas.