Este artículo refleja cómo el clown se convierte en un contenido adecuado para trabajar con alumnado de secundaria, desarrollando sus capacidades emocionales y relacionales. La utilización de una metodología basada en la resolución de problemas y el descubrimiento guiado potencia el desarrollo de la creatividad y la imaginación, y contribuye a romper los bloqueos e inhibiciones personales.