Este tipo de comida forma parte ya de nuestro modelo de consumo alimentario. Se ha incorporado más tímidamente entre los adultos y ha sido muy bien aceptado por nuestros jóvenes y pequeños. Pero su consumo suscita cierta desconfianza, su abuso se relaciona con la obesidad y su éxito hace temer la pérdida de las otras buenas costumbres alimentarias propias de nuestra dieta mediterránea. ¿Son temores infundados?
fast food
Muchas familias el fin de semana, principalmente, disfrutan de este tipo de comida. Es habitual entre jóvenes y adolescentes reunirse también en ese tiempo en torno …