En la adolescencia conviene distinguir entre tener conflictos y tener problemas, y hay que saber convivir con ellos en las instituciones y evitar que las respuestas creen el problema. En este capítulo se habla de todos estos elementos, ofreciendo consejos y estrategias para poder diferenciar ambas situaciones, y poder mejorar así tanto la convivencia escolar como nuestra intervención educativa con adolescentes en la educación secundaria.