Es curioso lo que sucede con la conectividad. Por un lado, parece que estar “siempreconectados” es una de las máximasaspiraciones que podemostener en la sociedadcontemporánea. Por otra, no haymayor ideal que el de “desconectar” los fines de semana o en verano- pero seguir “conectados”, víatecnología, con todos los que no están físicamente.