Al comparar la visión actual de los procesos sociales frente a la que se tenía a principios del siglo XX hay dos conceptos que marcan las principales diferencias: la aceptación de la complejidad y la inestabilidad que viene provocada por el continuo cambio.
La visión heredada del siglo XIX nos mostraba sociedades uniculturales, en las que la educación tenía un fin uniformador, basado en la transmisión del acervo cultural acumulado por cada nación a lo largo de su historia. En ese esquema social, cada país estaba caracterizado y los conocimientos necesarios para integrarse en su soci…