En los últimos tiempos, los medios de comunicación se han hecho eco de la situación de los menores extranjeros no acompañados. En muchos casos, la atención que se da a estos chicos es de contención, sin los recursos adecuados para desarrollar un proyecto educativo. Los educadores sociales reclaman medidas y unas condiciones dignas para trabajar con estos jóvenes y acogerlos.