Carlos acaba de salir de la escuela. Como cada día su mamá le está esperando a la salida.
-Mamá, cómprame unas golosinas -dice Carlos.
-Te he traído esta merienda que seguro que te va a gustar.
-No, no quiero el bocadillo, ¡quiero estas golosinas! -repite de forma insistente hasta que, viendo que su enfado no surte efecto, se tira al suelo pataleando.
-Levántate y vamos a comprar tus golosinas que nos están mirando todos tus amigos.
Carlos ha obtenido la bolsa de golosinas que exigía.
Ser padres supone saber educar, lo cual requiere amor, lógica, técnica, arte y conocimiento. No es f…
