Si el hombre no logra el necesario equilibrio personal para la felicidad, buscará una satisfacción supletoria, achacando su desequilibrio al que tiene al lado. Lo obligará a sentirse culpable, incómodo, inferior, atormentándolo, vendiéndolo, sacrificándolo o explotándolo.
Yehudi Menuhin
– En la elaboración del presente artículo se han tomado como referencia los trabajos del Comité Internacional de Investigación y Evaluación C.I.R.E., las líneas básicas de actuación de la Fundación Yehudi Menuhin, así como otros estudios y propuestas MUSE.