El buen desarrollo de una clase de música depende, en gran medida, de una organización eficaz de los espacios y recursos. Por ello, en este capítulo se aportan ideas para prever las condiciones físicas y materiales que debe reunir el aula de música, considerada como un espacio polivalente que puede transformarse en función de los requerimientos de las distintas actividades sugeridas en la programación.