Más allá de ir a buscar castañas o setas, pasear por el bosque en familia es una de las delicias del otoño si acertamos con el día: ni muy frío ni lluvioso. Y, además, nos llevaremos otros trofeos.
Más allá de ir a buscar castañas o setas, pasear por el bosque en familia es una de las delicias del otoño si acertamos con el día: ni muy frío ni lluvioso. Y, además, nos llevaremos otros trofeos.