Cuando los distintos profesionales que componen la comunidad educativa hablan del cuerpo o se refieren a él como elemento escolar, lo hacen con la boca pequeña, como refiriéndose a algo que es propiedad exclusiva de un sector concreto de sus miembros: el profesorado de Educación Física.
En general ha habido -y aún hoy, incomprensiblemente, hay- determinadas concepciones educativas que se basan en la idea, no siempre explicitada, de que el cuerpo ocupa un lugar secundario en el proceso educativo de las personas; una cosa es aprender y otra, muy distinta, moverse, jugar, experimentar, in…