La evaluación de cualquier área o materia pasa en demasiadas ocasiones por las formas de expresión escrita u oral. Ambos contenidos están recogidos en nuestro currículo educativo y se deben evaluar con sus propios criterios. ¿Ocurre siempre así?
La evaluación de cualquier área o materia pasa en demasiadas ocasiones por las formas de expresión escrita u oral. Ambos contenidos están recogidos en nuestro currículo educativo y se deben evaluar con sus propios criterios. ¿Ocurre siempre así?