El debate sobre el «tiempo educativo» se sitúa en un contexto social en el cual el concepto de tiempo ha sufrido una vasta evolución, pasando a ser hoy en día uno de los pilares que configuran nuestro modelo de sociedad y cultura y, en definitiva, nuestra vida cotidiana como ciudadanos y ciudadanas. El equilibrio y desequilibrio entre Kairós (el tiempo de los acontecimientos) y Cronos (el tiempo que mide los acontecimientos) es una de las manifestaciones de esta apasionante polémica.