Un signo de la grandeza del ser humano es la capacidad de transformar su esfuerzo en valor concreto, creando cosas valiosas con sencillos medios: un dibujo, un cálculo matemático, un aforismo, una canción. Es una experiencia que comparten artistas, pensadores, científicos y deportistas. La actividad musical es buena muestra de esta admirable capacidad de la inteligencia: tan solo necesita el concurso (que no el recurso, porque no es algo ajeno) de la voz humana o de un instrumento. ¡Y a cambio nos vuelve tantas sensaciones vividas! ¡Cuántos mundos recorridos y culturas habitadas! Con las vo…