-¡El viernes es mi día libre!
-Ojalá me ponga mala, así no tendré que ir a inglés.
-He visto nubes; si llueve, a lo mejor mi madre no me lleva a zumba.
-¿Pero no dijiste que la zumba te encantaba?
-Sí, me gusta, pero no para ir tantas veces.
-¿Y qué harías por las tardes si no tuvieras clases?
-Pues merendar en pijama viendo los dibujos y luego jugar con mis juguetes.