La diversidad LGBT es uno de los pilares fundamentales de la coeducación y debemos contemplarla como uno de los ejes transversales del centro. El sistema educativo ha de proveer a los profesionales de las herramientas necesarias para luchar contra la discriminación y para enseñar valores de respeto y empatía hacia el resto. Además, debe promover la formación del profesorado y fomentar la colaboración con las familias.