Pasamos muchas horas en las aulas, pero a veces las propuestas no tienen fuerza y los niños y las niñas no terminan de conectar. Todo ello a pesar de las horas que dedicamos a preparar y organizar clases. ¿Qué ocurre?
Pasamos muchas horas en las aulas, pero a veces las propuestas no tienen fuerza y los niños y las niñas no terminan de conectar. Todo ello a pesar de las horas que dedicamos a preparar y organizar clases. ¿Qué ocurre?