Hasta no hace mucho tiempo, un láser de He-Ne era un instrumento caro, grande y de manejo un tanto engorroso, sobre todo si el profesor decidía llevarlo a clase. El empleo en el comercio de láseres para la lectura de etiquetas de barra y la fabricación en grandes cantidades de aparatos más pequeños, ha hecho posible el abaratamiento de precios y la introducción en el mercado de los punteros láser, cuyo uso se ha popularizado y en gran medida desvirtuado: no es raro ver a niños con uno de esos juguetes “disparando” contra todo lo que encuentran en su camino.
Estos punteros ofrecen la…