En el artículo se cuestiona la relación entre escuela y comunidad en una época de cambios. Se propone que el medio escolar tenga continuidad en el medio social, y que se dé a los estudiantes la oportunidad de contribuir a transformar su entorno. A partir del legado de las pedagogías innovadoras y de experiencias de aprendizaje-servicio, se analizan los beneficios personales y sociales de una educación que involucra a los jóvenes en la comunidad.