Es de sobra conocido que la gran obra de la literatura hispana y universal que constituye el Quijote acabó con el género de caballerías, dominante hasta ese momento en el panorama literario de su época. Lo hizo gracias al dominio perfecto de los moldes temáticos y estilísticos en los que se vertía la creación literaria a la que dio fin. El remedo genial cerró las puertas a una época e inauguró otra.
Dijérase que la formación literaria de la Antigüedad ya era consciente de algo que mucho más tarde reformulara Mijail Bajtin: nuestras voces son portadoras de otras voces, nuestras…