La idea clave que aborda este capítulo es que, en realidad, no hay un conocimiento que enseñar, sino que desarrollar. La dificultad del aprendizaje científico no proviene del saber que los alumnos y alumnas no tienen, sino del que sí tienen. Por este motivo, en este capítulo se explica cómo cambiar el punto de vista y situar los conceptos y los modelos explicativos de los niños y niñas como punto de partida y materia primera con los que trabajar en el aula, orientando así hacia la construcción del conocimiento científico como elemento que siempre comporta procesos de cambio conceptual….
