La calidad de un sistema educativo va unida a la equidad. La equidad supone atender al alumnado en función de sus características personales y sociales, de manera que la igualdad de oportunidades constituya un hecho real. Esta igualdad no supone dar a todos lo mismo, sino dar a cada uno aquello que necesita. Por ello, la calidad efectiva de un sistema educativo pasa obligatoriamente por la atención a la diversidad, considerando las diferencias individuales como punto de partida de toda actuación educativa.
El alumnado es diferente y estas diferencias son debidas a múltiples factores. H…