Paula tenía siete años y le daba igual lo que dijera su hermano Ramón. Ella sabía que los Reyes Magos existían, que el rosa suave era el color más bonito del mundo y que al final del Arco Iris incluso tú sabes que hay un tesoro escondido.
Paula tenía siete años y le daba igual lo que dijera su hermano Ramón. Ella sabía que los Reyes Magos existían, que el rosa suave era el color más bonito del mundo y que al final del Arco Iris incluso tú sabes que hay un tesoro escondido.