Hablaré de esta experiencia personal. Hace unos días, las profesoras de una escuela me propusieron acompañarlas en la visita que el alumnado de sus cursos (entre 8 y 10 años) realizarían a mi exposición antológica del MACBA. Así lo hice.
Quedé verdaderamente sorprendido del comportamiento de aquellos 50 alumnos, de cómo se enfrentaban a los cuadros. Con el mayor interés y seriedad, pero no exentos de vivacidad, de las ganas de participar en los comentarios y la sensibilidad que en tales comentarios manifestaban.
sabían mirar
Aquellos niños poseían una cualidad que les sería úti…