Se presentan las características de algunos relatos habituales para introducir la tabla periódica (TP) en los libros de texto y su relación con hitos históricos de la evolución del concepto de elemento. A partir de ello, se argumenta que la TP se usa frecuentemente como clasificadora de átomos, dándole importancia a estos y a sus partículas como objetos de aprendizaje más que como herramientas de explicación de los fenómenos químicos.