Este capítulo se centra en la organización del currículum de educación infantil como elemento clave para introducir la atención a la diversidad, enfocándolo desde la perspectiva de la calidad en la educación. Para ello realiza una serie de consideraciones previas y propone una organización del currículo en actividades periódicas de todo tipo para ser aplicadas en una unidad didáctica. Asimismo, plantea diferentes metodologías educativas que pueden ayudar a fomentar la atención a la diversidad.