Durante el transcurso de una jornada cotidiana, ya sea laboral o del tiempo libre, ninguno de nosotros está exento de sufrir un golpe o una herida ni de caer enfermos. Este daño, temporal o permanente, que conlleva un deterioro de nuestras funciones físicas o psíquicas, es lo que entendemos por una lesión. Las lesiones más habituales son las que afectan directamente a los músculos, ya sea por contusiones o por una anomalía interna (distensiones, contracturas, calambres…). El grado de una lesión es variable, desde una leve molestia puntual hasta un dolor constante asociado con la …
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