Chuang-Tse soñó que era una mariposa. De pronto despertó: era Chuang-Tse y se asombró de serlo. Ya no le era posible saber si era Chuang-Tse que soñaba ser una mariposa, o era una mariposa que soñaba ser Chuang-Tse.(Chuang-Tse)Corrían las primeras décadas del siglo XX, y el matemático alemán David Hilbert se encontraba dictando un curso. Seguramente el número de estudiantes no era muy grande, como suele ocurrir en las clases de matemática; el hecho es que, sin previo aviso, uno de ellos comenzó a faltar. Hilbert lo notó, y preguntó a los demás si sabían algo de él; fue as…
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