Ahora más que nunca tenemos una gran oportunidad para soñar, planificar y poner en práctica una nueva escuela más adecuada a las necesidades reales de nuestra infancia. Pensando realmente en ellos y ellas, y para ellos y ellas. Teniendo en cuenta su presente, pero también su futuro. Esta pandemia no nos puede cercenar el anhelo de transformación educativa, más bien al contrario: debe ser la palanca para seguir trabajando en lo que realmente es importante. Así pues, os invito a hacer una pequeña degustación con la esperanza de que os abra el apetito. …