Desde hace algunos cursos, las “escoletes” de Menorca vienen movilizándose para dar respuesta a la pobreza y sus nuevas realidades que nos eran invisibles hasta entonces. A raíz de la progresiva implementación de las bonificaciones en las cuotas de las escuelas infantiles propuesta por el Observatorio de la Infancia y de la Familia, y asumido el compromiso por los ayuntamientos y el Consejo Insular, un buen número de familias que se encontraban en situación de vulnerabilidad económica tuvieron acceso a la escolarización de sus pequeños.