A pesar de que vivimos tiempos de gran polarización y dificultad para llegar a acuerdos sobre la educación, existe un elemento en el que todos los agentes con legitimidad y capacidad para tomar decisiones estamos de acuerdo: el profesorado es clave. Ha llegado el tiempo del profesorado, de escucharlo, de tener una visión global sobre la profesión y de formular propuestas coherentes y apoyadas en el conocimiento profesional y académico.