Sabemos que hay cosas que funcionan, queremos disfrutar del trabajo y podemos mejorar, tanto desde el punto de vista individual como colectivo.
Sabemos que los proyectos tienen un inicio, que evolucionan y que se cierran o se sustituyen para empezar otros. En los centros educativos, las prioridades, las diferentes necesidades y algunas urgencias hacen que a veces estos procesos no sean demasiado conscientes.
Sabemos que algunos proyectos mueren o quedan interrumpidos sin cerrar o evolucionar, y que esto sucede a veces cuando se sustituye a la persona que lidera un determinado proyecto…
