En la etapa de educación infantil, la expresión corporal es un medio excelente de aprendizaje, puesto que forma parte del juego que el alumnado desarrolla espontáneamente. En este artículo presentamos una propuesta pedagógica para estimular la danza utilizando los colores como fuente de inspiración, coloreando el espacio, pintando un cuadro, improvisando con la luz y bailando con los colores de las emociones para reconocerlas y gestionarlas.