El pasado 4 de mayo, y tras un largo trámite parlamentario, el BOE publicaba la Ley Orgánica de Educación (Ley 2/2006, LOE en adelante). Su formulación final puede entenderse, tal como Gobierno y medios de comunicación afines proclaman, como resultado de un largo proceso de negociación con entidades sociales y partidos políticos. También podría entenderse, tal como el Partido Popular y su plataforma mediática sostienen, como la más exacta manifestación del revanchismo que guía la política de Zapatero.
Lo último y lo anterior
El antecedente inmediato de esta Ley lo constituye la…