Hay muchas cosas que ya no son verdad, pero lo han sido durante tanto tiempo que es difícil dejar de creer en ellas. Sería demasiado duro revisar nuestras ideas sobre el mundo cada día; por eso, en aras de la economía, preferimos no hacerlo, a menos que sea muy necesario.
Existen algunos campos en los que nos movemos entre ideas heredadas que emergen de un pasado cuyo sentido ignoramos, aunque lo seguimos manteniendo sin cuestionarlo. Esto ocurre, como en muchos campos, en el campo de los contenidos de la enseñanza. Se supone que la enseñanza obligatoria tiene por objeto preparar al al…