En enero de 1936, un maestro promete a su alumnado de un pueblecito de Burgos que lo llevará al mar. Pero, al estallar la Guerra Civil, el maestro es asesinado y arrojado a una fosa común. En el 2010, la historia cobra actualidad al excavar una fosa de los montes de La Pedraja donde pueden encontrarse sus restos. Desde entonces, la recuperación de su memoria se ha materializado en libros, documentales y proyectos escolares.