Es normal que en nuestra tierna infancia comencemos a aprender gracias al juego. Mediante juegos aprendemos a socializarnos y a comportarnos en determinadas situaciones, y adquirimos los conocimientos básicos sobre los que vamos a estructurar nuestro aprendizaje posterior. Por ello, en los primeros años de la enseñanza reglada es muy importante el juego. Hace muchos años, se consideraba que los aspectos lúdicos relacionados con el juego eran incompatibles con la enseñanza a medida que se avanzaba en el proceso de aprendizaje y, por ello, iban desapareciendo paulatinamente a medida qu…