Una de las dificultades en el aprendizaje de la derivada es que los significados analítico o gráfico que los estudiantes construyen no están relacionados. Para lograr esta coordinación, proponemos una planificación de la enseñanza en primero de bachillerato basada en la idea de trayectoria de aprendizaje. Esta idea conlleva un cambio de perspectiva en la actividad del profesor; las tareas se secuencian no desde la lógica de la matemática, sino desde la del aprendizaje de los estudiantes.