El artículo presenta una jornada deportiva, saludable y sostenible mediante dos yincanas cooperativas en las que participa todo el alumnado del centro, su claustro de docentes y la comunidad educativa. Los juegos cooperativos hacen participar a todo el alumnado, evitan la exclusión, fomentan la creatividad y potencian las conductas sociales. Si a ello añadimos los hábitos saludables y la conservación del medio ambiente, tenemos el éxito asegurado.